Lentisco ( Rambla del Conejo-Elda)
Lentisco
Nombre científico: Pistacia lentiscus
Descripción:
El lentisco es un arbusto o arbolito dioico, con plantas macho y hembra independientes entre sí, siempre verdes y de una altura comprendida entre 1 y 5 metros, que además presenta un fuerte olor resinoso.
Sus hojas son alternas, coriáceas y compuestas peripinnadas ( sin foliolo terminal), con 6 a 12 foliolos de un verde muy intenso durante todo el año, al ser una planta perenne y son lanceoladas.
Presenta flores muy pequeñas, las masculinas con 5 estambres y las femeninas de un estilo trífido, siendo su fruto una drupa, primero de color rojo y más tarde negra al madurar, de unos 4 mm. de diámetro, no comestible para el hombre pero sí para las aves.
Hábitat:
El lentisco crece en los matorrales secos y pedregosos de la Europa mediterránea y del norte de África. Resiste mal las fuertes heladas y se desarrolla en casi todo tipo de suelos, preferentemente en las zonas calizas e incluso salitrosas, lo que hace que también sea relativamente abundante junto al mar.
Los ejemplares de lentisco suelen encontrarse de forma aislada, pues casi nunca forman grandes extensiones de ejemplares, habitando preferentemente en los bosques claros, coscojales, encineras, etc, y siempre en collados, gargantas y cercanías de ramblas y laderas rocosas del área mediterránea.
En nuestro entorno eldense es rara la zona de nuestros montes donde no se vea algún ejemplar de lentisco, y así en todas nuestras sierras (Bateig, Camara, Altos del Gordo, Las Cañadas, etc) es casi seguro ver algún ejemplar aislado, especialmente en los cauces de ramblas ( Rambla del Gobernador, Rambla de los Conejos, Rambla de Bateig, etc.) poniendo siempre una nota de verdor en ellas.
Características y usos:
Las hojas del lentisco tienen unas potentes propiedades expectorantes, por su alto contenido ( algo más del 11% ) de taninos y otras materias astringentes, por lo que no es recomendable administrar a niños sin consejo médico.
Tambien es empleado para fortalecer dientes y encías, y sus hojas, masticadas, son una buena solución para la halitosis, pues tiene la propiedad de perfumar agradablemente el mal aliento.
Además tiene propiedades cicatrizantes y es especialmente indicado como fortificante digestivo, empleándose también contra la diarrea y como potenciador del apetito.
Galería fotográfica:
Lentisco (Las Cañadas-Elda)